La noche de los nahuales ║ Benjamín M. Ramírez
UN TICKET PARA EL PRESIDENTE, Y QUE NOS MANDAN A LA HOGUERA (PARTE II)
El grupo de profesores manifestantes ubicado en las inmediaciones del Zócalo se congregaba para conocer los pormenores de los acuerdos después de haber sido concertada una plática con autoridades de la SEP, en Argentina 26.
PINOT, liderazgo que se impone.
Asequible, sencillo, pero imponente. Su voz se alza para dar a conocer, a nombre de todos los que integran la Federación Nacional de Sindicatos de Colegio de Bachilleres, FNSCB, las demandas que de manera general se integran en el pliego petitorio en donde convergen el pago del aumento salarial correspondiente a este año, 2020, el pago para los profesores acreedores al estímulo K1, así como las demandas que cada representación sindical expresa a través de la FNSCB.
Ya encabezando las movilizaciones, atendiendo a la prensa, o a las dificultades por las que atraviesan sus agremiados que lo acompañan en esta movilización, el doctor Víctor Manuel Pinot, puede bogar entre el mar de dificultades porque conoce a pie juntillas los entresijos de la negociación.
Así lo percibí, con sus cualidades de líder.
Es la figura del dirigente nato, del que sabe delegar responsabilidades y tareas, el que encabeza una reunión pero que propone a otros representantes de la federación de sindicatos para que se presenten en otras mesas de negociaciones, por la imposibilidad que significa el estar en la Cámara de Senadores, donde es recibido y atendido por el presidente de este cuerpo legislativo para liberar las trabas financieras que afectan los bolsillos de todos los profesores de los Colegios de Bachilleres.
Pinot, incluye, facilita, brinda confianza, permite que otras voces se escuchen, está atento a las opiniones y a las sugerencias para las maniobras a seguir frente a las dificultades propias en este tipo de movilización magisterial. Y lo que es más importante siempre va al frente, en la vanguardia.
En la Secretaría de Educación Pública no quieren que se presente el grueso del contingente de profesores manifestantes. Pinot exhorta al gremio a no dispersarse, a mantenerse unidos, a estar en contacto de forma incesante. Quien atenderá a la delegación conformado por siete representantes estatales indica los mecanismos y exigencias para iniciar el diálogo.
El ingeniero Garibo, líder del Sindicato de Profesores de Baja California, se encuentra en ese grupo que entra a las negociaciones en las instalaciones de la SEP. Todos quieren participar en la mesa. Las razones de espacio, el COVID-19, y otras razones, sólo permitirá la entrada a una delegación de los manifestantes.
Una patrulla de la policía de la Ciudad de México se encuentra apostada frente a nosotros para llevarnos a las oficinas de la SEP, el cuadro surrealista causa sorpresa a propios y extraños. —Ya nos llevan —digo— directo al palacio Negro de Lecumberri. Se toman las fotos para el recuerdo y por otras medidas de seguridad. La policía no quiere que los representantes se cansen frente a las vicisitudes que representa el centro amurallado.
Ya el pliego petitorio extendido y expedido con anticipación a la prensa y a la mesa de atención del gobierno federal debió llegar a manos del primer filtro de atención. Sus preguntas son muy pueriles: ¿Qué hacen aquí? ¿Por qué se están manifestando? ¿Qué es lo que piden?
Muy a su estilo, el doctor Pinot, tranquilo y muy propio, responde a cada uno de los cuestionamientos poniendo al tanto de quien nos recibe en la SEP, de las razones de nuestra manifestación: la demanda del incremento salarial, el pago del K1 a los maestros Destacados, los ofrecimientos de quien prometió gestionar y la nula respuesta del gobierno federal en turno a todas las demandas expresadas a través de los medios convencionales.
«— ¿Qué es el K1? —pregunta el interlocutor de la SEP.
«— ¿Cómo a cuántos maestros se les debe? —inquiere.
«— ¿Cuánto dinero se les debe? — sondea.
Todos estamos sorprendidos. Pido el uso de la voz. Afirmo que me parece preocupante que la SEP no tenga esos datos, cuando en el portal de la misma dependencia se puede tener acceso a los mismos.
Se molesta. En su defensa manifiesta que la SEP es muy grande. Sólo logro tener un pensamiento que pasa vertiginosamente por mi mente: —Y ustedes, demasiados pequeños. No quiero hacer más álgido el momento y poner obstáculos a las negociaciones. La reunión continúa.
Quien está al frente de la FNSCB manifiesta que en caso de no ser atendidos nos iremos a paro, apagaremos cámaras y monitores, desconectaremos computadoras, en suma, realizaremos un paro virtual. Lo anterior toma por sorpresa a quien nos atiende.
Minutos antes agradeció el haber liberado el USICAMM. Ahora pide diez minutos. Nos quedamos solos para acordar las otras acciones: la cita en el senado, y como representación estatal queremos llegar a San Lázaro, y ser atendidos por los diputados federales que representan a Baja California.
El Subsecretario de Educación Media Superior podrá atendernos a las 16:30 horas, nos informan. Los maestros, en el grueso del contingente, piden un espacio para poder desayunar y realizar algunas cuestiones de higiene personal. Nos preparamos para tocar otras puertas.
LOS TAQUITOS DE CANASTAS Y OTROS MANJARES.
La representación sindical de Baja California a través del SPCOBACH se sitúa en una de las puertas del palacio legislativo. Los guardias del recinto nos dicen que no podemos entrar. Aparte, reparan en la lona que llevo bajo el brazo.
Se solicita la presencia del diputado Erwin Areizaga quien sale a recibirnos. Un par de llamadas y la entrada al recinto está arreglado. Nos atiende. Primero escucha nuestras inquietudes, me concede una entrevista, nos lleva a su oficina. Muy amable pregunta si ya hemos comido. —No, respondemos. Le pide a su asistente que vaya por unos taquitos de canasta. Después del convite nos pone en contacto con el Secretario de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, con el diputado Héctor Cruz. En el pleno de San Lázaro está la comparecencia del Secretario de Hacienda.
El diputado Héctor Cruz nos atiende, escucha nuestras demandas; consulta, se ofrece a enviar una tarjeta informativa para gestionar lo que a derecho corresponde. Nos envía el acuse de recibo de la gestión ante el titular de Hacienda.
«— Lo que se pueda hacer por la educación y los maestros, lo haremos —expresa.
Nos preparamos para ir al Senado. Ya el doctor Pinot se ha adelantado y se encuentra a la espera de ser atendido. Nos disculpamos. Por razones de agenda, la salida cae estrepitosamente sobre nuestras espaldas.
La tensión del grupo ha disminuido considerablemente. Sólo queda el remanente de la noche anterior y el vuelo que despega para llegar a Tijuana antes de la media noche.
En el transcurso de estos días se darán a conocer algunos avances de estas negociaciones a pesar de los obstáculos que, en sí mismos, presentan los grupos disidentes en las entidades federativas en contra de las acciones llevadas a cabo por quienes tienen la titularidad del Contrato Colectivo de Trabajo.
Espero poder referir buenas nuevas para todos los maestros de Colegio de Bachilleres en todo el país.
En otro orden de ideas, don Porfirio tendrá que esperar a una nueva vuelta para conocer al ganador de las encuestas para la designación del presidente de Morena. Telenovela de bajo presupuesto en donde las acusaciones, al estilo del viejo y desahuciado régimen priista, están a la orden del día.
Incluso don Porfirio, a quien admiro sus dotes de oratoria de antaño, pretende llegar a la presidencia del partido en el poder, implorando el apoyo del inquilino de Palacio Nacional. Espero que a don Porfirio no le entreguen su ticket y lo pongan en lista de espera para ser atendido en su demanda.
Mis dudas sobre la confiabilidad de la encuesta permanecen, ya que quienes determinarán la balanza a favor del ganador no son todos los simpatizantes o militantes del Movimiento de Regeneración Nacional, Morena.
Para concluir, desafortunadas son las palabras del escritor de “En media hora la muerte”, Francisco Martín Moreno, muy en su estilo neoliberalista y con la sangre criolla que lo caracteriza al expresar su deseo de mandar a todo simpatizante de la 4T, a la hoguera.
Sin afán de recomendar, al gobierno federal le hace falta un buen equipo de buenos negociadores.