La noche de los nahuales || Benjamín M. Ramírez
EL GRITO
Por Benjamín M. Ramírez
Terminó el fin de semana para dar paso al declive del mes patrio.
Desaparecen el folclor, los antojitos mexicanos y el picante, la música, los fuegos artificiales, los colores, el papel picado, las banderas, el mariachi y el charro, el tequila, el mezcal (el whisky no tiene lugar) y las cervezas, —deben ser Corona, Victoria, Modelo o Tecate (no hay pie para la cerveza artesanal) —, las empanadas, las campanadas…
Queda la resaca de un país que aún susurra voces de libertad.
El grito se transforma en duelo, desasosiego, ansiedad, zozobra, preocupación y nerviosismo.
Gritan las madres en su interminable búsqueda de paz y justicia por los miles de muertos y desaparecidos.
Grita el obrero al que no le alcanza para el pan. El grito se asoma cuando observa los precios de la canasta básica, siempre arriba, siempre en lo alto, inasequible.
Grita el desempleado en su pesquisa de trabajo, de un salario digno, que alcance para llevar a casa lo más indispensable.
Grita el político en su ambiciosa búsqueda de la cobija que le dará calor en la administración futura. Vocifera arengas y vivas para el candidato que le redituará innumerables dividendos. Por ello, y con avidez, se pondrá a la orden y cantará las proclamas del poder para encumbrar a la ungida.
Gritos: porque aún no somos capaces ni estamos preparados para el diálogo, para la negociación, para ponernos de acuerdo, para el pacto que posibilite la transformación de este país que lo reclama, lo exige y lo necesita.
Como patriotas somos dados al festejo, a los vítores, a la fiesta, a la degustación y, con orgullo, de nuestra comida mexicana que llena, pero no nutre.
El grito es la muestra irrefutable del inmenso silencio que nos oprime, que asfixia y aniquila.
El grito ahoga, mata y extingue el dolor callado de los meses anteriores al festejo patrio y nos prepara para el fin del año que ya entra en agonía, conjugándose el duelo en las inmensas penas de noviembre, para abrir el puente del olvido, en el tránsito lento de un tiempo que se transforma en eternidad.
Gritamos porque es el único recurso que tenemos a la mano. Porque es así como nos educaron desde niño, a gritos y sombrerazos.
El grito es inacción, pasividad y cobardía.
El que es valiente no grita, medita, sopesa, tantea, otea las posibilidades del entorno y actúa en consecuencia.
Grita el que sufre, el que padece dolor, el que ha perdido el rumbo y la esperanza.
El grito transforma al hombre —La Llorona— en monstruo, en máquina, en nada. El grito niega el diálogo, lo imposibilita, lo obstruye, lo retrasa.
Grita el que no tiene argumentos, el que piensa que debe alzar la voz para imponerse, sin caer en la cuenta de que en cada grito aflora su ineptitud, su impotencia, su baja autoestima y su desconfianza.
Los gritos son anónimos y en el anonimato las palabras perecen. No sobreviven al escrutinio ni a la censura o a la apertura.
Queda el silencio después del grito, de tanto alcohol, de tanto festejo…
Los gritos se diluyen, se apagan, desaparecen.
Ahogado el grito:
«— ¡Muera la corrupción!
«— ¡Viva!
VIII ENCUENTRO NACIONAL CULTURAL Y DEPORTIVO DE LOS COLEGIO DE BACHILLERES
Este fin de semana, 21, 22 y 23 del mes en curso, Baja California será sede del Encuentro Nacional Cultural y Deportivo de los Colegios de Bachilleres.
Algunos eventos deportivos se realizarán en el Centro de Alto Rendimiento de la Ciudad de Tijuana, ubicado en las inmediaciones de la Universidad Autónoma de Baja California.
La convocatoria para este evento de alcance nacional se lanzó con meses de anticipación y las inscripciones para participar en los diversos encuentros se cerraron el pasado 3 julio.
En este encuentro se tiene contemplado la presencia de las diversas delegaciones que se encuentran afiliadas a la Federación Nacional de los Colegios de Bachilleres —FNSCB— siendo el anfitrión el Sindicato de Profesores del Colegio de Bachilleres del Estado de Baja California, SPCOBACH, bajo el liderazgo y conducción del ingeniero Eric Garibo Cárdenas. Después del evento celebrado en el estado de Campeche, Baja California fue designada sede para este año 2023.
Entre algunas de las disciplinas en la que competirán las diversas delegaciones serán: softbol, atletismo, voleibol, basquetbol, beisbol, en sus diferentes ramas; ajedrez, danza folclórica, declamación, oratoria, canto, pintura y fotografía.
En la página oficial del SPCOBACH se menciona que para la organización de este encuentro en la que saldrán a la luz los […] “talentos académicos y deportivos [y] para garantizar un evento exitoso, se han llevado a cabo reuniones con personalidades claves para el desarrollo de esta competencia. Una de estas figuras fundamentales es Erik Morales, actual Director del Instituto del Deporte y la Cultura Física en Baja California (INDE BC).
Este esfuerzo colaborativo es realizado en conjunto con la Federación Nacional de Sindicatos de Colegios de Bachilleres, una alianza que destaca la importancia de la educación y el deporte en la formación integral de los jóvenes”.
Bienvenidos sean todos a Baja California, Brazo poderoso.