Recuerdan a sus angelitos en el Día los Difuntos Inocentes
Dicen que son sentimientos agridulces. Por un lado, hay nostalgia porque no está en el plano terrenal, pero también hay alegría al sentir su presencia este día, también conocido como el Día de los Angelitos.
Ana Lilia Ramírez
Playas de Rosarito, 01 de noviembre de 2024.- Este primero de noviembre, cientos de personas acuden a los panteones para visitar a sus angelitos: niños, niñas y bebés fallecidos. En la cultura mexicana se cree que sus almas, tan inocentes, son las primeras en ascender al cielo y un día antes del Día de Muertos, sus almas regresan brevemente al plano terrenal para convivir con sus seres queridos.
En el panteón municipal de Rosarito, acudieron Doña Miroslava Elena Álvarez Arreola y Don José Gómez, quienes visitan la tumba de su nieta Blanca Sarai Gómez Madueño. Blanca nació en el 2006, pero solo vivió algunos días.
“Blanca Sarai nació con una infección y duró solamente 11 días. Ella fue gemela y este año se cumplen 18 años de su fallecimiento; mi otra nieta acaba de cumplir 18 años el pasado 5 de octubre”, compartió Doña Miroslava.
Los amorosos abuelos, de avanzada edad, han estado visitando la tumba de su nieta durante 18 años. Dicen que mientras tengan vida, continuarán haciéndolo, pues, aunque solo conocieron a Blanca Sarai por unos días, siempre estará en sus corazones.
Dicen que son sentimientos agridulces. Por un lado, hay nostalgia porque no está en el plano terrenal, pero también hay alegría al sentir su presencia este día, también conocido como el Día de los Angelitos.
“Es una tristeza, pero a la vez alegría, porque se nos fue ella (Blanca Sarai), pero nos quedó mi otra nieta. Tenemos la costumbre de visitar a nuestros difuntos, porque tengo a mi suegra, a mi mamá, a mi hermano, a mi cuñado y a mi cuñada, que están en varios panteones de Tijuana. Ella (mi nieta) es la última porque vivimos aquí en Rosarito”, señaló Doña Miroslava Elena Álvarez.
“Es triste recordarlo. Lo más importante es estar bien con Dios para que ellos estén bien donde descansan ahora. Eso es lo más importante en la vida”, dijo Don José Gómez.
La pareja, que ha compartido una vida juntos en matrimonio, señala que a su avanzada edad, hacen todo un recorrido por los panteones de Tijuana y Rosarito este Día de Muertos, ya que son muchos los familiares y amigos de los que se han despedido y que ahora descansan en la vida eterna.
“Tenemos a mi papá, mis hermanos, una hermana y una madre que están en la Iglesia de San Francisco, en la calle Tercera. Siempre los visitamos cada año”, comentó Doña Miroslava.
“Con la edad que tenemos, hemos perdido a muchos conocidos. Es triste que se vayan, pero como dice nuestra religión: ‘la semilla tiene que morir para poder renacer’. Venimos hoy para evitar las aglomeraciones”, añadió Don José, con nostalgia.
Así, cientos de personas inician sus recorridos este primero de noviembre para visitar a sus almas inocentes que se adelantaron en el camino: sus niños, niñas y bebés difuntos, pero también aprovechan para recordar a sus fieles difuntos adultos.