Al reconocer que “continúa habiendo mucha violencia” en México, el presidente Andrés Manuel López Obrador planteó la posibilidad de un acuerdo nacional para enfrentar el flagelo. “Tenemos que aplicarnos y convocar a toda la sociedad para conseguir la paz. Yo creo que lo vamos a lograr, pero es un proceso y vamos poco a poco”, sostuvo.
En conferencia de prensa, destacó en este contexto que no se utilizará la fuerza ni se castigará a la gente para que en esta contingencia por la pandemia de Covid-19 se mantenga en casa.
Mencionó que antes de un acuerdo nacional para enfrentar la violencia, se necesita avanzar más en la atención de las demandas sociales; “más atención a la pobreza, más impulso a la educación, más apoyo a los jóvenes, más bienestar, y también ir aislando a las bandas dedicadas a la delincuencia, quitándoles las reservas de jóvenes que van enganchado por necesidad, por pobreza”.
Afirmó que con reparto de despensas, los delincuentes piensan que “van a seguir teniendo una base de apoyo. La verdad, es que ya no es lo mismo. Eso ya no predomina.
Salió lo de las despensas por lo de Covid –repartidas en Guadalajara, Jalisco, por la marca El Chapo 701-, pero muy aislado, porque la gente está siendo atendida”.
Los jóvenes, insistió, ya tienen trabajo, a través del programa Jóvenes construyendo el futuro y existen pensiones dentro de los esquemas sociales. “La gente tiene esperanza de que vamos a salir adelante y están ayudando. Ya no es fácil decir ´vénganse, aquí no les va a faltar dinero´. Hay autoridad moral y eso da autoridad política”.
López Obrador planteó hacia delante “que haya trabajo para todos, que nadie se vea en la necesidad de tomar el camino de la delincuencia y poder llegar a un acuerdo. Pero eso lo tenemos que construir entre todos y tomar en consideración a los familiares de las víctimas”.
Subrayó que ya no se permite a nadie actuar fuera de la ley, “y se castiga por igual al delincuente común que de cuello blanco. La ley se aplica parejo”.
Afirmó que “antes, con las bandas, había arreglos; se protegía a una banda para perseguir a otras. No me vayan a pedir pruebas, porque no me va a costar mucho responder, pero no tiene caso, eso ya no hay”.
El presidente consideróque resolver la violencia, como lo de las afores, son temas pendientes. “En efecto, no sólo es Covid, seguimos teniendo mucha violencia en el país y tenemos que seguirnos aplicando, convocar a toda la sociedad para conseguir la paz”.
Ahora “es salir adelante con lo de la pandemia, recuperar la economía y que haya bienestar, pero sigue siendo un tema de preocupación la violencia en México para nosotros. Lo del Covid ocupa nuestra atención, recursos, trabajo, lo amerita, pero también lo otro está ahí todavía.
La violencia, sostuvo, “no se resuelve porque fue una herencia de muchos años, de descomposición en todo sentido: pobreza, abandono de la gente, se le dio la espalda a los jóvenes, corrupción, contubernio entre autoridades y delincuencia, estilo de vida, fomentaban mucho lo material, como si eso fuese lo más importante. Es todo un proceso de transformación”.
Resaltó que por tradición diplomática, en México siempre hemos estado a favor de la paz mundial, y en el país “todos los días estamos luchando por eso”.